– Amanda, son los Beatles – dijo al fin reaccionando
– ¿Ellos? – Los observé por un buen rato – En definitiva no
son de York. Su acento es distinto, tal vez británico – Pensé en voz alta. No
me parecía que fueran ellos, eran… diferentes
– Si, son ellos. Acuérdate de él chico que tocaba el bajo,
es él – mencionó señalando a uno de ellos
Capítulo 4
– Muchas gracias. Bueno ahora hay que ir a la estación, será
mejor que arreglen este problema allá – ordenó el oficial
– ¿Y mi auto? – pregunté
– Una grúa vendrá por él – respondió
– Maldición – dije entre dientes
– Chicos, ahí viene su transporte – dijo el señor de aspecto
serio que acompañaba a los “Beatles”
– Que bueno, porque yo me quiero ir – sentenció el flacucho
– No, ustedes no pueden irse. Deberán asistir todos a la
estación para declarar su versión de los hechos – explicó el oficial, a lo cual
todos hicimos muecas de desagrado
– Pero ¿para qué? si todo está muy claro – exclamó el tal
John – Esta bruja acompañada de su loca amiga golpearon el auto por no fijarse
– me acerqué a él y le di un pisotón que por los gestos que hizo le dolió mucho
– HAHAHAHA – Los otros chicos comenzaron a reír como locos
– Haber si así te callas – lo amenacé
– Eso sí que fue gracioso – decía el chico de rostro
inocente mientras se doblaba de la risa – ¡Me duele el estómago! – seguía riendo sin parar
– ¡Cierra el pico! – gritó furioso John, el imbécil
– Pero que genio, Lennon – mencionó el flacucho alzando una
de sus cejas
– Por favor tranquilícense y suban al auto que los llevaré a
la estación – nos pidió el oficial
Nos subimos al auto y llegamos en unos minutos. Hicimos
nuestras respectivas declaraciones, entre peleas e insultos inofensivos pero
logramos hablar cada quien, se podría decir que todo se aclaró y admití ante el
“juez” que yo había sido la causante. Hasta que llegó lo que me temía.
– Señorita, ¿usted es la propietaria del auto? – me preguntó
el oficial
– No, mi madre lo es – respondí con la voz temblorosa
– ¿Podría usted llamar a su madre para que ella responda por
los gastos necesarios? –
– Seguro – mi muerte estaba a punto de ocurrir
Me indicaron donde se encontraba el teléfono, lo tomé,
descolgué y marqué el número de la morgue digo, de mi casa. Fueron los segundos
más largos de mi vida al escuchar el sonido del teléfono.
– Por favor no contestes. Por favor no contestes. – rogaba
en mi mente
Nos veremos el próximo fin de semana(:
NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! JUSTO EN EL MEJOR MOMENTOOO!!???
ResponderEliminarAjaja, ya me había olvidado que hoy era Domingo xD
AHHHH! NOO! Y ahora que va a pasar? D: NONONONO!
Quién se quedará con Amanda?? Dioos! Necesito saberlo! Será John? No lo creo, se odian demasiado. George? Ringo? Paul? D: Quiero saber! u.u
Bieen, tendré que esperar al sábado, no? :'(
LO ESPERARÉ TOOODO LO QUE SEA NECESARIO!!
Síguela!! Se está poniendo super interesante, y como siempre te digo, es extremadamente original! Juro que nunca leí una historia parecida a esta!
Saludos Ale ^^
Y SI MUERE AHORA??? QUE HACEMOS?? NOOOOOOOOO ME QUEDO SIN TU NOVELA!!! MORIRÉ U.U! XD
ResponderEliminarESPERO EL NEXT¡